lunes, 19 de noviembre de 2012

Más de lo mismo...


Vive...

Nace prohibido. Sus llantos calmados con miradas de sinceridad, alivio. Divisa sin abrir los ojos, entiende lo sucedido, se calma paciente. Siente el calor de una madre, felicidad entre abrazos, sonrisas que se ven grandes. Visitas de extraños, regalos, declaración de emociones mientras pasan los años.

Crece ipsofacto. Lo que eran 2 tallas forman parte del pasado, asombro. Todos aplauden los primeros pasos, cuentan los meses, inmortalizan los ratos. Álbum de fotos, fotogenia de enanos, abolida la protección de datos. Primer balbuceo de palabras, tranquilidad, libertad de expresión.

Hace amigos. Rivalidad de parvulario por ese puzzle amarillo, socialización. Análisis de progreso, sufrir los cambios del pediatra al colegio. Fuera los pañales, un gasto menos, bienvenidos calzoncillos del héroe del momento. Noches de pesadillas, sudores fríos, una voz te calma modificando lo sucedido.

Ignora primero. Inocencia sana deambula por el hogar, privilegio. Que otros discutan a sus anchas, los gritos se calman a base de dibujos animados. Te pareces a tu bisabuelo, las muecas son de tu abuelo, la personalidad aún no tiene dueño. Si apruebas, premio, si suspendes, fuera paga, democracia familiar.

Desarrolla cerebro. Lo que antes era un cuento, ahora en VO, realismo. Eres objetivo, sobrecarga de consejos, empiezas a mirarte en el espejo. Cambios fisiológicos, abres fronteras, te sientas en el parque a hablar con los colegas. Escuchas, observas, asientes, confusión, no sabes qué hacer con tanta información.

Recoge apuntes. Edad de llevarlos a la práctica o dejar de estudiar, rebeldía. Des-aprendizaje cotidiano, la educación que te han dado se erosiona sólo con ver el telediario. Te forjas como persona, descubres el bien, te llevas un palo. Hora de desconectar, momento insensato, utilizas tu libertad probando cosas de malvado.

Vive señalado. Unos quieren una ruta, otros señalan su regazo, cansado. Resuelves tus problemas, los de los demás, eres psicólogo sin título oficial. El karma te persigue, solitario, confías en ti mismo y en tu don del egoísmo. Acierto bipartito, decides, omites, consigues ser tú mismo pasito tras pasito.

Respira libre. Tiene su estilo y principios, para unos es único, para otros distinto, be yourself. Paciencia enamorada, amor de novato, pintas mundos de colores con sólo un garabato. Uno y uno son cuatro, al quinto estadística de inmediato. Aspiras, risueño, te echas una siesta que sin querer dura unos años.

Suspira esperanza. Nada puede salir peor, y qué groso error, aprendizaje. Músculos comprometidos, corazón de tres capas, alzas la vista y la vida sigue su camino. Pierdes amigos, ganas enemigos, se equilibra la balanza pensando en uno mismo. Independencia docente, te queremos, escribes tu destino a la luz de tu flexo preferido.

Permanece perdido. Por más que busques, menos tiene sentido, certeza. Hoy cuentas facturas, recargos, recuerdas aquellos buenos recuerdos al ser niño. Despiertas dormido, insomnio, más vale este asco de vida que residir en manicomio. Tiempo de retraso, te motivas pensando, curas la monotonía probando vicios remunerados.

Habla orgulloso. Pasado olvidado, presente en vida, futuro de tono oscuro, mentalidad. Cambio de percepción, prioridad, ya no miras por fuera, te quedas con lo de dentro. Loco pero sano, dulce pero salado, tradicional y moderno, raro. Carrera neuronal, colección de nervios, hoy en día ganan todos menos aquellos que merecen un premio.


... muere.

jueves, 4 de octubre de 2012

La VIDA, ese malévolo invento


La vida es premeditada, siempre hay un porqué para hacer llegar un nuevo ser al mundo.

La vida es injusta, hay quienes tienen mucho, quienes tienen poco, y quienes no tienen nada.

La vida es ilusionista, de pequeño quiero ser bombero, de mayor quiero no morir.

La vida es efímera, hoy tienes fotos de cuando eras pequeño, mañana de cuando te recuerdan.

La vida es tangible, un trozo de carne en charco de sangre puede representarla bien.

La vida es viajera, hoy está con nosotros y mañana se oyen gritos de “se nos va”.

La vida es valiosa, por ella se pagan recompensas, se llora, aclama, venera y suspira.

La vida es trifásica, pañales al principio, granos entremedio, huesos al fin y al cabo.

La vida es didáctica, de lo vivido por algunos, se educan a unos pocos.

La vida es confianzuda, se llena de problemas y no te pide opinión.

La vida es egocéntrica, se cree valiosa por encima de las demás cosas por haber.

La vida es bipolar, lo que es vicio para muchos, es pecado para otros tantos.

La vida es diplomática, por conservarla se pueden llegar a pactar mil y un tratos.

La vida es coleccionista, su archivo ilimitado de aciertos y errores así lo refleja.

La vida es omnipresente, desde un mosquito a una ballena; desde un esclavo a un político.

La vida es colorida, hay vidas de muchos colores, donde predominan las blancas y las negras.

La vida es rencorosa, llegar al mundo es la cuenta atrás para la venganza de la muerte.

La vida es materialista, y es que hoy día vale más el cuerpo que el alma.

La vida es consumista, desde un pañal, preservativo, luna de miel, biagra, hasta una lápida.

La vida es estúpida, no sabe lo que tiene hasta que lo pierde.

La vida es viciosa, piensa y hace cosas aunque sepa que están mal, y repite.

La vida es presumida, recibe un piropo y no se cansa a maquillarse para recibir otro más.

La vida es dócil, basta una mirada, una herencia, un tropezón, un mal lugar, un día de mala suerte.

La vida es juguetona, y por muy bien que juegues siempre terminará ganando ella.

La vida es bella, aunque no lo sea el maquillaje con el que se pone guapa todos los días.

La vida es alcohólica, los fines de semana llega el vaho a los registros de la DGT.

La vida es superficial, con el título se compra el contenido, sin hablar de libros.

La vida es cómica, por una manzana nos comemos un marrón.

La vida es amiga, y enemiga cuando se lo lleva.